¿POR QUÉ EL ALUMINIO?

El aluminio es un elemento común que constituye el 8% de la corteza terrestre y se presenta en la naturaleza bajo forma de mineral: la bauxita.

El aluminio se debe considerar un metal  “reciente” si se compara con el hierro o el acero: a diferencia de estos dos metales, que han marcado las etapas fundamentales de nuestra historia, el aluminio se usa desde hace poco más de un siglo. En poco tiempo, este material se ha impuesto en la sociedad moderna industrial, sustituyendo en gran medida a los metales tradicionales.

Debido a sus características de ligereza, ductilidad, conductividad, maleabilidad, durabilidad y permeabilidad, el aluminio se emplea en diferentes sectores: automoción y transportes, construcción, aparatos domésticos, mecánica general, electromecánica, embalajes.

En particular, la conductividad térmica de 120-130 W/mk, las notables propiedades físico-químicas y las particulares características de estanqueidad bajo presión, hacen del aluminio un elemento ideal para la producción de  cuerpos calentadores.